La ajustada victoria de Mendiri obliga a votar de nuevo el próximo miércoles
Los tres candidatos a abad de Las Siete Palabras acuerdan aplazar la segunda convocatoria entre la confusión y el cansancio de la asamblea
Los tres candidatos a abad en la Hermandad Penitencial de las Siete Palabras pusieron fin a la tensión, cansancio y confusión de la asamblea al término del recuento de la primera convocatoria para elegir al nuevo presidente. La ajustada victoria de Javier Mendiri (166 votos) sobre José Luis Esteban (140) y José Carlos Blanco (66) obligaba a una segunda votación que sobre el papel estaba anunciada para las 19.15 horas, pero ya eran más de las nueve de la noche y buena parte de los hermanos se habían marchado a sus casas ante el sempiterno recuento al que obligó a primera hora de la tarde la convalidación de los votos emitidos por correo. El proceso continuará el próximo miércoles, día 23, a las 19.30 horas. Los tres aspirantes volverán a verse las caras.
Los estatutos establecían la celebración de una asamblea de carácter extraordinario para elegir al nuevo abad, un acto que se inició a las cuatro y cuarto de la tarde. Allí, los hermanos tuvieron que decidir si daban validez a todas las cartas recibidas para participar en los comicios -algo más de doscientas- o solamente las que tenían fecha de entrada del pasado 15 de mayo, fecha límite para la entrega. Finalmente, fueron acogidas también las que contaban con el matasellos con la fecha correcta, una decisión que permitió comprobar las cartas e introducir los votos en la urna establecida para el proceso presencial. Fue este lento procedimiento el que originó una demora formidable en el recuento de los votos emitidos.
A eso de las nueve de la noche, los presentes en la asamblea tenían más o menos claro que Javier Mendiri, abad en funciones, había ganado las elecciones, pero sin la mayoría absoluta necesaria para conseguir la reelección. De hecho, Mendiri solo obtuvo 26 sufragios de diferencia con respecto a José Luis Esteban, que consiguió 140 y que fue dominando de forma clara en el inicio del recuento.Por su parte, José Carlos Blanco se llevó otras 66 papeletas para ocupar el tercer lugar en las votaciones.
Y ahí se inició un tremendo lío entre la comisión electoral -firme en su decisión de continuar con la votación pese a haber superado los horarios transmitidos a los hermanos en la convocatoria- y muchos de los miembros de la asamblea, que comenzaron a pedir continuar el proceso en otra fecha por el reconocido cansancio y la presencia de muy pocos hermanos en el salón de actos del Museo de Semana Santa.
Después de casi una hora en la que la comisión electoral no pudo imponer su decisión, los propios candidatos acordaron suspender el acto para celebrar la segunda sesión otro día. El presidente del órgano que regula el proceso, Luis Antonio Hernández, comunicó que los aspirantes habían decidido reanudar la votación el próximo miércoles desde las siete y media de la tarde. Asimismo, Hernández aprovechó la cita para hacer pública la decisión y evitar una nueva comunicación por correo. «Me niego a gastar otros 1.400 euros para informar a los hermanos», aseveró ante el refrendo de los presentes.
Los estatutos establecían la celebración de una asamblea de carácter extraordinario para elegir al nuevo abad, un acto que se inició a las cuatro y cuarto de la tarde. Allí, los hermanos tuvieron que decidir si daban validez a todas las cartas recibidas para participar en los comicios -algo más de doscientas- o solamente las que tenían fecha de entrada del pasado 15 de mayo, fecha límite para la entrega. Finalmente, fueron acogidas también las que contaban con el matasellos con la fecha correcta, una decisión que permitió comprobar las cartas e introducir los votos en la urna establecida para el proceso presencial. Fue este lento procedimiento el que originó una demora formidable en el recuento de los votos emitidos.
A eso de las nueve de la noche, los presentes en la asamblea tenían más o menos claro que Javier Mendiri, abad en funciones, había ganado las elecciones, pero sin la mayoría absoluta necesaria para conseguir la reelección. De hecho, Mendiri solo obtuvo 26 sufragios de diferencia con respecto a José Luis Esteban, que consiguió 140 y que fue dominando de forma clara en el inicio del recuento.Por su parte, José Carlos Blanco se llevó otras 66 papeletas para ocupar el tercer lugar en las votaciones.
Y ahí se inició un tremendo lío entre la comisión electoral -firme en su decisión de continuar con la votación pese a haber superado los horarios transmitidos a los hermanos en la convocatoria- y muchos de los miembros de la asamblea, que comenzaron a pedir continuar el proceso en otra fecha por el reconocido cansancio y la presencia de muy pocos hermanos en el salón de actos del Museo de Semana Santa.
Después de casi una hora en la que la comisión electoral no pudo imponer su decisión, los propios candidatos acordaron suspender el acto para celebrar la segunda sesión otro día. El presidente del órgano que regula el proceso, Luis Antonio Hernández, comunicó que los aspirantes habían decidido reanudar la votación el próximo miércoles desde las siete y media de la tarde. Asimismo, Hernández aprovechó la cita para hacer pública la decisión y evitar una nueva comunicación por correo. «Me niego a gastar otros 1.400 euros para informar a los hermanos», aseveró ante el refrendo de los presentes.